lunes, 4 de enero de 2016

Reseña del libro "Cinco panes de cebada".

"Cinco panes de cebada" es una novela realista escrita por Lucía Baquedano, quien da voz a Muriel, protagonista que nos cuenta sus primeras experiencias como docente. La joven maestra al acabar sus estudios tiene que marcharse a  un pequeño pueblo de Navarra, un pasaje rural en el que nunca hubiera pensado tener que trabajar.
Entre los temas tratados destacan: el mundo rural, la religión cristiana y el amor. 

Autor y contextualización:

Lucía Baquedano Azcona nació el 18 de diciembre de 1938 en Pamplona. Estudió secretariado y trabajó durante 9 años como secretaria en una empresa. Al contraer matrimonio se trasladó a Tarragona, pero pasado un tiempo, regresó a su lugar natal. 
Se crió en una familia lectora y, antes que los libros, conoció los cuentos que le contaban los mayores de la casa. Admiraba a los escritores. Afirma que fue una niña a quien le gustaba escribir y una adolescente y voraz lectora. Esto le ha llevado a ser una reconocida autora en la literatura infantil y juvenil contemporánea y  una de las más destacadas escritoras navarras.
En 1960, con tan solo 23 años, mientras trabajaba en una oficina de Pamplona, decidió escribir su primera novela "Cinco panes de cebada", dirigida a jóvenes. Escribió sin ningún propósito determinado, sólo porque le gustaba escribir, y eligió el mundo rural porque disfrutaba en el pueblo de su padre a donde iba con frecuencia. En este libro nos habla de una situación diferente a la actual, donde se estaba introduciendo la maquinaria y los recursos, tanto materiales como económicos, eran inferiores a los actuales. 
Animada por la buena acogida que tuvo, continuó escribiendo para ellos y para los más pequeños. En total ha publicado 18 libros, y lo que pretende es entregarnos en cada historia todo aquello que ella hubiese querido leer y la huella imborrable que en ella dejaron cuentos y novelas.

Resumen del libro:

Con 21 años, Muriel aprobó las oposiciones con unas excelentes calificaciones. Para su sorpresa, fue destinada a un pequeño pueblo del pirineo navarro, Beirechea, donde no había muchos alumnos.
Desilusionada, piensa en pedir el traslado a otra escuela que merezca la pena, pasado el primer mes. Al llegar al pueblo y ver la situación: una escuela antigua y estropeada, un pueblo de gente cerrada, que piensan que es una persona esmirriada... Su decepción fue en aumento. 
Se alojaba en la casa de Pello, junto a su esposa, sus hijos y la abuela. Los primeros días fueron muy duros, pero con el tiempo y asumiendo que debería estar ahí una temporada, su desánimo fue desapareciendo. 
Llegó el inicio de curso y Muriel estaba emocionada por conocer a sus escolanos. Para su sorpresa, no todos los niños que aparecían en la lista, que tras algunos esfuerzos el alcalde le había proporcionado, asistían a clase. Preguntó a sus padres por ellos y estos le dijeron que los necesitaban para que les ayudaran en las faenas del campo, pero finalmente, Muriel hizo entrar en razón a los padres y los niños fueron a la escuela.
Poco a poco, con ayuda de don José Mari, el cura del pueblo, va comprendiendo su tarea en ese lugar: hacer que los habitantes de Beirechea entiendan que la educación les ayudará en todo lo que quieran hacer en el futuro. Fue integrándose en aquel pequeño pueblo, hizo algunos amigos y se fue acostumbrando a la vida rural, de tal forma que cada vez retrasaba más su vuelta a Pamplona.
En la escuela seguía sin aparecer una alumna, Marta Arive, a quien ninguno de los otros niños había visto nunca. Preguntando a la gente del pueblo llegó hasta la casa de los Arive. Allí encontró a Javier, propietario de esa bonita casa enorme. Le pregunto por Marta y él le dijo que era su hermana y que ya hacía tiempo que no vivía en el pueblo. La lista estaba equivocada. 
Decidió crear una biblioteca en la escuela, con libros que ella había leído de pequeña. Así, fue dándose cuenta de que su lugar estaba en esa escuela de pueblo; hasta tal punto que su hermana Silvia llegó al pueblo para ofrecerle un puesto de trabajo en la capital y Muriel lo rechazó.
Acaba el curso y se marcha de vacaciones a su casa, en Pamplona. Allí se da cuenta de lo mucho que echa de menos a Javier y en general, a Beirechea. Al regresar al pueblo tras las vacaciones ve como todo su esfuerzo ha tenido recompensa, ya que Teresa Ipaguirre, que ya tiene 14 años y por tanto, ya no es obligatorio que vaya a la escuela, decide seguir estudiando en Pamplona. 
Su relación con Javier cada vez va a mejor, hasta que deciden quedarse juntos en Beirechea para así mejorar la situación cultural del pueblo, tanto en la agricultura como en la escuela. 

Estructura:

El libro se divide en 16 capítulos. Narrado en primera persona, en voz de la protagonista Muriel, por lo tanto, narrador protagonista.
Vemos que en la narración hay un orden lógico que empieza con la tristeza de Muriel, que va avanzando hacia una ilusión para que sus alumnos aprendan y finalmente, llega al cariño del pueblo de Beirechea y de Javier.
La historia transcurre durante un curso escolar, y el espacio principal es el pueblo de Beirechea.

Tema e ideas principales:

El tema principal de la obra es la adaptación de Muriel en su inicio de la vida laboral. Darse cuenta de que las situaciones que parecen malas al principio, al final pueden acabar gustándonos e incluso siendo lo mejor que nos ha podido pasar en la vida.
Las ideas principales las encontramos gracias a la evolución de la protagonista: la amistad que establece Muriel con los habitantes de Beirechea, y la ilusión, paciencia, sacrificio que pone al servicio del pueblo para la mejora de la educación de los niños, y en general de todos los habitantes, debido a su afán de superación. Cuando haces algo por vocación, estas características son habituales en la persona.

Personajes:

Los más destacados en la historia son:
Muriel: Una joven de 21 años que acaba de terminar su carrera de magisterio con unas notas brillantes en las oposiciones y que debe adaptarse a la vida de pueblo, donde empieza su experiencia como maestra. Vemos que su personaje es redondo ya que evoluciona durante la obra.
Don José Mari: Es el cura del pueblo y un gran apoyo para Muriel. Hace que ella se sienta a gusto en el pueblo, en parte, gracias a la religión, y le ayuda a entender a la gente del pueblo. A principio de la obra nos cuenta que él también viene de la ciudad. Es un personaje plano, ya que no evoluciona durante la obra.
Javier Arive: No aparece desde el principio de la obra pero cuando lo hace, es una personaje muy importante por su relación con Muriel. Es una chico solitario, que no sale mucho de casa y nos cuenta que ha tenido un pasado que le ha marcado. También evoluciona, ya que finalmente se vuelve más sociable, sobre todo con Muriel, y decide ayudar a los agrícolas del pueblo.

Título:

El título de la obra es “Cinco panes de cebada”. Sin haber leído el libro, el título no parece estar relacionado con el tema principal: la vida de una maestra en un pueblo.
Al final de la obra comprendemos que hay un paralelismo entre la historia de Muriel y el milagro de la Biblia de los 5 panes y los 2 peces, con lo que Jesús consiguió alimentar a miles de personas.
Lucía Baquedano elige este título porque Muriel consigue, con poco, hacer algo impensable en Beirechea, que cambie la mentalidad de los adultos, que se interesen por la cultura y que los niños sientan interés por los libros y los estudios.

Opinión personal:

En primero de la ESO leí este libro como lectura obligatoria y recuerdo que me gustó mucho. Tras la segunda lectura, he tenido la misma sensación, incluso mejor, ya que ahora veo ese futuro más cerca. Podría decir que es uno de mis libros preferidos, y es que creo que esta historia no deja indiferente a nadie; podemos aprender mucho de ella. Nos hace ver que aunque tengamos un comienzo difícil, con esfuerzo y buena actitud podemos conseguir grandes cosas, además, también vemos que aunque el del ámbito rural sea un estilo de vida muy diferente, con menos recursos, tecnologías y modernidades, las personas son igual de felices, no necesitan tantas cosas innecesarias que en las grandes ciudades pensamos que son imprescindibles.
Al principio de la obra, me he visto reflejada en Muriel, ya que es verdad que en los pueblos tienen una idea equivocada de las chicas de ciudad.
Para terminar, decir que Muriel es un personaje que plasma una postura de maestra ideal, de la que como futura maestra, espero tener muchas cosas en común, como su ilusión y su entrega.

Bibliografia:

http://www.navarra.es/home_es/Temas/Turismo+ocio+y+cultura/Bibliotecas/Recomendamos/Guias+de+lectura/Baquedano/biografia.htm

http://www.unav.es/nuestrotiempo/es/temas/despiece/lucia-baquedano